Ante las constantes sospechas que los partidos electorales ARENA Y FMLN hayan orquestado un bloque técnico para impedir que Bukele rompa el bipartidismo; el líder de Nuevas Ideas, está por inscribirse como precandidato usando el CD.

Que el CD había sido cancelado fue una breve leyenda metropolitana, los magistrados del TSE están ante los ojos de millones de personas, ciertamente tienen la potestad legal para resolver en contra del CD, eso se ve llegar, a  no ser, que Bukele desista en su objetivo de ser candidato.

Son probables varios escenarios, despues del cuatro de agosto se vislumbra el reconocimiento oficial como partido constituido a Nuevas Ideas, inhabilitado técnicamente ante los comicios electorales del 2019.

Ante un panorama desolador, Bukele, experto estratega de la publicidad, sabe muy bien, que al ser candidato por medio del CD, agiliza la muerte de ese partido, pero anticipa sus victorias populares; parafraseando al mismo Bukele, podríamos decir, que, si queda fuera el líder de Nuevas Ideas; ‘ cualquier candidato oficial ganará las elecciones, será LEGAL, PERO  NO LEGÍTIMO.’.

Todo este panorama político demuestra, que en El Salvador existe una democracia dictatorial, el Estado se encuentra en crisis de credibilidad, y los tres órganos del Estado ( Ejecutivo, legislativo y judicial ), pero también otras instituciones, como el TSE, la PNC, los ministerios en su conjunto.

Un modelo neoliberal que no le resolvió los problemas económicos y sociales a la población, el bipartidismo entre ARENA Y EL FMLN, la pugna de los grupos de poder económico, la falta de justicia social, la perdida de la memoria histórica, el deterioro del medioambiente, el éxodo indetenible de las y los habitantes de El Salvador.

Desde 1992, en El Salvador se vendió la idea por medio de la superestructura del Estado, que había paz y democracia, son dos cosas totalmente falsas, la paz no se firma, es un proceso que nace cuando surge la posguerra, pero en nuestro país no hubo reconstrucción moral, ni social, mucho menos justicia, con la amnistía se cerro todo.

Existe la democracia, pero para las cúpulas dominantes y  para la vieja y la nueva oligarquía, cuando las niñas y los niños repiten los 16 de enero la palabra PAZ, es un asqueroso adoctrinamiento sobre algo que no existe, de esa forma, el pueblo crece sin saber en cual país vive, esa ignorancia colectiva, alimenta al poder dominante.

Con el fenómeno social e inédito  llamado Movimiento Nuevas Ideas, como recipiente que contiene un trozo del pueblo, se quiebra el miedo a pensar  y la gente inicia hacer preguntas, y la población ya va entendiendo quienes son sus verdugos, por lo tanto, si el TSE cierra el CD, le permite al pueblo que despierte más rápido, y pueden inscribir tres o seis CD, ese no es el problema, el asunto principal para la gente es, el estallido de la » situación revolucionaria «, en el sentido de protestar permanentemente ante una sociedad fallida, un Estado fracasado y la mediocridad de los tres órganos del Estado.

Legalmente el TSE puede decidir, pero, la gente organizada es superior a cualquier poder legal, en ese caso, lo legal se convierte en ilegal y viceversa, porque un pueblo organizado y con objetivos claros, es capaz de auto-gobernarse, y eso haría, derrumbar todos los poderes legales que hasta la fecha no han demostrado de conocer al pueblo Salvadoreño.

La jugada de ajedrez de Bukele es, estar con la gente, aprender de ella, luchar con ella y dejarse guiar por las inspiraciones del pueblo hambriento, cuando la gente deja de pensar con el estómago y usa la cabeza, cualquier Estado, tiembla.

 

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