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Haremos un breve recorrido de los acontecimientos más significativos de esta última semana, recordando que mi objetivo es brindar un análisis independiente y fuera de toda propaganda, la intensión como documentalista de los hechos tiene a la base mostrar el mundo al desnudo para que cada lectora o lector saque sus propias conclusiones.
Todo el material mostrado en este y otros reportes han sido tomados de internet de diferentes fuentes, en mis manos no han pasado por ninguna alteración.
La guerra es un acto de encuentro mortal entre dos posiciones, la política y el componente militar, en algunos casos, la guerra es un medio para lograr la estabilidad, no la paz, porque eso es una pretención muy elevada.
Ya lo hemos dicho, la guerra en Ucrania es un punto dentro de la geopolítica, la OTAN y Rusia seleccionaron a Ucrania para medir sus fuerzas, en otro momento veremos la parte humanitaria y los desastres que esta decisión comporta; en estos momentos me dedico a analizar el desarrollo político y los movimientos claramente militares.
Tenemos dos frentes, Kursk en Rusia y las cuatro regiones en el sur de Ucrania (lugansk, Donetsk, Zaporiyia y Jersón) principalmente, porque la guerra se extiende en todo el territorio ucraniano, los ataques rusos llegan desde Odesa hasta la frontera con Polonia.
Hace unos días Ucrania con el apoyo tecnológico de la OTAN, lanzó dos ataques importantes, en ambos, las noticias que corrieron por las redes fueron alarmantes, algunos analistas en youtube llegaron a pensar que se trataba de un ataque atómico contra Rusia, al pasar de las horas nos dimos cuenta de que no era así, sino, ataques precisos contra almacenes rusos cuya explosión provocó estallidos impresionantes, e incluso, sismos de más de dos grados.
Han sido dos duros golpes para Rusia, ciertamente estos ataques no definen la guerra, pero son indicadores de la escalada sin límite de la guerra, en la cual, los dos actores, la OTAN y Rusia cruzan todo tipo de línea roja.
La OTAN disfrazada de Ucrania le quiere demostrar al mundo que Rusia no es invencible, al contrario, es vulnerable porque las armas de la OTAN pueden golpear cuando quieren y donde quieren, al mismo tiempo muestran la eficacia y eficiencia de sus armas, ya sea drones o misiles, todo esto con un apoyo satelital preciso en tiempo real.
La incursión del ejército ucraniano en Kursk tuvo su éxito en los primeros seis días, del 6 de agosto a la fecha de este artículo, las fuerzas rusas están conquistando sus territorios y las tropas ucranianas corren el riesgo de quedar atrapas en grandes bolsas, Rusia pretende cortar la retaguardia llegando a sus fronteras internacionalmente reconocidas, pero observo que Rusia quiere ir por Sumy.
Ese frente puede llegar a su punto cúlmine a finales de diciembre a la vista del avance rápido de los rusos, sin menospreciar la feroz resistencia y moral combativa de las fuerzas armadas de Ucrania en Kusrk, el líder político de Ucrania, Zelensky reconoció que esa operación tiene sus riesgos, es decir, el riesgo de perder.
Ucrania no logró llegar a la central atómica de Kursk y expandirse en otras localidades de relevancia, la burbuja se está desinflando y miramos un cementerio de vehículos blindados de la OTAN en las zonas ocupadas, esa misión militar le ha costado mucho a Ucrania, la pérdida de varios equipos de lanzadores de misiles múltiples (Himars) y otros recursos de gran valor económico que la OTAN le ha entregado a Ucrania, algunos como donaciones y otros vendidos.
El monto total de la deuda que está acumulando Ucrania a la OTAN es imprecisa, la deuda aumenta a gran velocidad y de igual forma Ucrania va perdiendo la guerra, Rusia se quedará con menos del 20% de territorio que es lo que actualmente controla Rusia y una deuda impagable, y falta la fase de reconstrucción.
Ucrania tendrá pocas maniobras, entre ellas, privatizar los recursos del Estado y ofrecer sus materias primas a la OTAN y otros socios de Ucrania. Sin embargo, las ayudas siguen, en estos días la Unión Europea impulsar enviar 160 millones de euros del dinero ruso congelado en bancos europeos para enviarlos a Ucrania.
Por otra parte, también pudimos constatar una vez más las grietas en la Unión Europea, Italia por ejemplo, está teniendo un protagonismo al oponerse en darle vía libre a Ucrania para que ataque con armas occidentales puntos sensibles de Rusia, en la plenaria de hace pocos días, las delegaciones de Italia votaron en contra del parágrafo 8 de la resolución en la que la UE le da permiso a Ucrania de escalar la guerra, otros países siguen el paso de Italia.
Con esta guerra en Ucrania vemos las venas podridas de la estructura de poder en Europa, las élites que administran mal el dinero de los contribuyentes, y se atreven a inflar su presupuesto, hoy están pidiendo 800 mil millones de euros para solventar los errores que la administración anterior creó, y hoy, son los mismos grupos de poder que siguen controlando las políticas y las finanzas de la UE.
En el frente del sur de Ucrania la dinámica de la guerra nos presenta una fotografía clara del rumbo de las operaciones militares rusas, desde el 6 de agosto /24 las tropas rusas han aumentado la actividad en toda la línea del frente, con la incursión del ejército ucraniano en Kursk, Rusia no desplazó sus batallones en Kursk; sin embargo, Ucrania tuvo que mover lo mejor que tenía para lograr penetrar territorio en Rusia en el menos tiempo posible, el alto mando militar ucraniano se vio en la necesidad de desplazar artillería, vehículos blindados, tanques, hombres, logística, suministros, inteligencia militar, soporte de las unidades de drones, alimentación, medicinas, personal médico, todo eso, para Kusrk, debilitando los frentes del sur.
Esos vacíos los está aprovechando rusia, que ya aprendieron en más dos años de guerra que el choque frontal, que si bien le ha permitido ganar el 20% del territorio previsto, pero le ha causado un derramamiento de sangre tremendo y la pérdida sensible de gran material de guerra, en la actualidad, están empleando la guerra de maniobras y envolvimiento, Rusia avanza en los flancos y rodea a las tropas ucranianas que tienen dos opciones, pelear hasta morir o retirarse.
Esta nueva forma de hacer la guerra le está permitiendo a Rusia avanzar de forma más rápida y perder menos hombres y suministros de guerra, la guerra es toda una ciencia y un arte, en la medida los pelotones de asalto avanzan, la artillería se mueve más hacia adelante, la retaguardia estratégica mueve sus líneas también y la ruta de abastecimientos se estira, es toda una lógica, y ese fue uno de los errores de los ucranianos en Kursk, hemos visto vehículos blindados abandonados por falta de combustible y personal médico capturado porque intentaban llegar a las líneas de contacto para brindar los primeros auxilios a los militares ucranianos heridos.
Rusia no está logrando sus objetivos en el tiempo previsto, pero no va perdiendo, Ucrania no está teniendo éxito en Kursk ni en el sur, y va perdiendo la guerra, esos son dos constantes en esta guerra, pero no solo va perdiendo Ucrania, también la OTAN y los 50 países que apoyan a Ucrania, luego de esta guerra el mundo no será igual, el poderío de la OTAN se pondrá en duda y la economía de Occidente se verá cara a cada con la realidad.
Si bien es cierto que la guerra en Ucrania le ha permitido a la industria militar en USA la oportunidad de empleo para miles de personas, también es cierto que con los anuncios de un congelamiento de esa guerra al ganar Donald Trump, la cotización en la bolsa de valores de esas industrias de la guerra ha bajado, y eso se traduce en desempleo.
Es verdad que con el aumento del presupuesto de todos los países que conforman la OTAN al 2% de su PIL ayudará los países constructores de armas un alivio a sus finanzas, es verdad también que la economía global no pasa por un buen momento.
La guerra en Ucrania tiene una lógica, por muy macabro que parezca, es un escenario para medir fuerzas y dinamizar las economías, en este mundo multipolar, el brazo armado y dispuesto a jugar en la cancha de guerras es Rusia para el bloque de los BRICS, y la OTAN para Occidente, el laboratorio se llama Ucrania, lugar en el que se están experimentando nuevas armas y reciclando el viejo material de los años 80s, es un buen lugar para deshacerse de instrumentos obsoletos y ensayar un posible enfrentamiento directo entre la OTAN-Occidente y Rusia-China-Irán-Corea del Norte.
La guerra tiene una lógica, no es producto de un capricho, la guerra proporciona las herramientas necesarias para definir los nuevos equilibrios mundiales, la idea de la OTAN era agotar a Rusia para luego ir por ella, sin embargo, se está demostrando lo contrario; es verdad que Rusia quedará cansada luego de esta guerra, pero dejará el mensaje que la OTAN no es el gigante que se presenta.
No me gusta hacer predicciones, sin embargo, según la nueva movilidad de la guerra, Rusia necesita otro año para conquistar sus objetivos por medio de la guerra, conquistar por completo los cuatro óblast, queda pendiente el tema de Odesa, Rusia no tiene la fuerza para iniciar una operación ahí, antes necesita consolidad las cuatro regiones en contienda, eso no significa que deje de atacar Odesa, siempre hay actividad y destrucción de armas o posiciones ucranianas en esa zona.
Para cerrar este artículo, en estas semanas se viene inundando los medios de información sobre la llamada segunda cumbre de la paz propuesta por Ucrania, también se escuchan los rumores de la nominación a Zelensky para el Novel de paz, precisamente, un tema propagandístico, es extraño que un país que va perdiendo pretenda obligar al vencedor que acepte sus términos, más bien creo que se dará lo contrario en su momento, cuando Rusia decida terminar, a Ucrania solo le quedará una opción, aceptar las condiciones dictadas por Rusia.
Brasil y China han propuesta una hoja de ruta para congelar la guerra, pero no le parece bien a Occidente, por lo tanto, se podrán celebrar miles de cumbres impulsadas por Ucrania, pero sin la participación de Rusia y sin las condiciones rusas, todo quedará como lindas selfis de los presidentes que apoyan a Zelensky.
Mientras tanto, la OTAN disfrazada de Ucrania seguirá atacando a Rusia, cada vez más fuerte y Rusia seguirás su plan de conquista, un país que va ganando no cae en provocaciones, sería absurdo si Rusia, que va ganando la guerra lanza una bomba nuclear táctica en Ucrania, eso sería contraproducente, pero existen voces en Rusia que desean eso, es cierto que la OTAN cada vez más va intensificando sus ataques en territorio ruso, pero las respuestas de Rusia son siempre con armas convencionales.
Veremos más almacenes rusos arder, ataques en Moscú, ataques a barcos comerciales rusos, ataque contra la población civil rusa, pero el gobierno ruso no lanzará una bomba nuclear táctica; lo que veremos es más ataques brutales en Ucrania, viene el invierno y el frío es cruel, no se descarta que Rusia deje sin calefacción una vez más a la población ucranianas, esa también es una respuesta letal, la guerra no es una alegre poesía, es un espectáculo Dantesco visto con indiferencia por gran parte de la humanidad.
Jandres JS (Escritor y poeta) -Italia.